Sólo hay que echar un vistazo al mundillo éste de las bitácoras para darse cuenta que se pueden englobar en unos pocos grupos en función de su temática (con uno de los grupos muy grande que sería el de "otros").
Echando un segundo vistazo te das cuenta que la mayoría de blogs populares son de aquellos que podríamos llamar personales. Ya sé que muchos lo son de alguna manera (incluso el mío), pero en este caso me refiero a los más personales. Aquellos que nos explican la vida de los que los escriben. Y uno se da cuenta de lo populares que son por la gran cantidad de comentarios que hay. Y si hay tantos comentarios... ¡cuántos más los estaran leyendo!
Hay que ver... ¡qué curiosos que somos! ¡cómo nos gusta meternos (entrometernos incluso) en la vida de otras personas! ¿que clase de placer morboso encontramos en saber las intimidades de completos desconocidos? Tengo que confesar que yo también he caido en las redes de algunos de estos blog-culebrones pero... prefiero no explicar mis intimidades ;-)